Retail: los consumidores siguen valorando el trato personal
Los consumidores siguen queriendo encontrar trato humano cuando visitan un establecimiento físico, aunque no dejen de utilizar sus móviles al mismo tiempo.
La aplicación de la tecnología al retail es una de las prioridades más recurrentes en la actualidad de las marcas, pues la sociedad evoluciona hacia una era conectada en la que las relaciones digitales y los dispositivos tecnológicos son imprescindibles. Por ello, compañías de todo tipo de sectores buscan incorporar la tecnología a sus puntos de venta, consiguiendo que el cliente se sienta más cómodo y proporcionándole una experiencia de compra completa. En este sentido, los avances 2.0 en el sector del retail son una de las herramientas más importantes que las marcas están utilizando para diferenciarse de sus competidores.
La importancia del trato personal
No obstante, parece que las marcas están olvidando que no todo es blanco o negro. En este sentido, un análisis de Euclid Analytics acaba de demostrar que tres cuartas partes de los consumidores hombres y un 65% de las compradoras siguen queriendo interactuar con vendedores cuando acuden a un establecimiento, en detrimento de ser atendidos únicamente por tecnología.
Además, a esos datos se les suma que el 65% de las mujeres desea que los especialistas les hagan recomendaciones a medida, o que les ayuden a determinar qué productos se adaptan más a sus necesidades. Por este motivo, aunque un 46% de mujeres y un 41% de hombres se interesan por tiendas operadas por tecnología, el papel de los profesionales en el punto de venta sigue siendo crucial. Estos datos corresponderían tanto al ámbito del comercio como a sector de la atención al cliente.
No es beneficioso ir de un extremo al otro
En cuanto a las soluciones tecnológicas, las marcas tampoco deben olvidar que el consumidor valora gratamente la integración de lo físico y lo digital. En este sentido un 37% de las consumidoras usa su móvil para compartir con otros usuarios información sobre sus compras, mientras que los hombres lo hacen en un 24% de los casos.