Entrevista a Pau Miret, investigador en el Centre d’Estudis Demogràfics

Entrevistamos al doctor en sociología e investigador en el Centre d’Estudis Demogràfics Pau Miret para analizar la situación de la natalidad en España.

Los índices de natalidad en España están bajando de forma continuada los últimos años, activando así las alertas. Para poder analizar las consecuencias reales de esta situación y lo que implica registrar una de las tasas de natalidad más bajas de la Unión Europea, entrevistamos a Pau Miret, investigador en el Centre d’Estudis Demogràfics y doctor en sociología por la UNED.

- A grandes rasgos ¿cuáles son los principales factores que causan que la natalidad esté estancada en nuestro país?
- La natalidad en España sigue el curso del ciclo económico, recuperándose en periodos expansivos y deprimiéndose en etapas recesivas. La práctica inexistencia de políticas familiares que puedan actuar con un efecto contracíclico provoca que el mercado de trabajo sea la principal razón en la evolución de la natalidad. El mercado laboral se caracteriza por una fuerte precariedad y, sobre todo, por un desempleo rampante, que en momentos de crisis puede llegar a alcanzar fácilmente el 25%. Mientras subsistan las condiciones actuales, la natalidad continuará bajo mínimos.

- ¿Qué papel juega el cambio de mentalidad de las nuevas generaciones?
- En todas las encuestas sobre valores, las nuevas generaciones expresan su deseo de tener en promedio 2 hijos. Ello evidencia la gran distancia entre expectativas y comportamientos reales. Es un cambio de mentalidad importante, pues no hace tanto que se tenían tres o cuatro hijos por familia antes de plantearse seriamente el control de la natalidad. Además, otro cambio en este sentido es el surgimiento de una estrategia familiar, es decir, que ya no se tienen hijos “a pesar de todo”, sino que son necesarios unos prerrequisitos de cierta estabilidad laboral y habitacional, aunque sea a corto plazo.

- ¿Qué papel juegan las políticas de conciliación familiar y laboral en la evolución de la demografía española?
- Cuando nos preguntamos qué mujeres cumplen sus expectativas de natalidad en mayor medida, la realidad nos responde de manera contundente: son las mujeres fuera del mercado laboral remunerado y las que reducen su jornada laboral. En otras palabras, las que no concilian, ya sea porque se retiran del mundo laboral o porque lo compatibilizan con la vida familiar sin interferencias entre ambas esferas.

De todas formas, es evidente que la vida laboral y la familiar son irreconciliables sin políticas que ayuden a ello, o sin las ayudas familiares gratuitas que se usan cotidianamente (las abuelas). Estas políticas de conciliación deberían centrarse en transferir recursos directamente desde el ámbito público a las familias con población dependiente en su seno (infantil o con alguna invalidez). Si, además, se pretende fomentar la igualdad de género, todas estas políticas deberían ser igual e intransferibles según sexo, e incluso podría argumentarse que durante un cierto periodo de tiempo deberían ser mayores para los hombres que para las mujeres, por aquello de cambiar mentalidades.

- ¿Cuál es su previsión acerca de la evolución de la natalidad en España?
- La evolución de la natalidad en España está marcada por la evolución de la economía. Si seguimos con el mismo ritmo cíclico de las economías occidentales (y nada apunta a pensar que no será así), este año 2018 supondrá un punto de inflexión de la natalidad, que conducirá a otro período de incremento de la misma durante los próximos 8 años. Alrededor de 2026 tendrá lugar otra crisis económica (que creo que en España estará relacionada fundamentalmente con el turismo, la única área económica que aún se muestra eufórica a pesar de la última crisis y que emplea una fuerza de trabajo, en general, de bajo nivel de instrucción) y ello supondrá, de ser así, una nueva crisis de la natalidad, igual de fuerte y contundente como las que se dieron con la crisis de la bolsa de 1929, la del petróleo a mediados de los setenta o la inmobiliaria en 2008. Es lo que parece entreverse en un análisis de la evolución de la natalidad en España durante los últimos noventa años.